Paola Basso se convirtió en la ganadora de las PASO porque, más allá de no haber sido la lista más votada, consuelo que quedó en manos de la nómina que lidera Daniel Creus, es quien comandará la fuerza que más votos obtuvo: Juntos. Los ex Cambiemos y Juntos por el Cambio, con las cuatro nóminas en competencia, fueron la fuerza más votada, con un discurso que recicló las propuestas de campaña que llevaron a Macri y a Vidal al poder.

Guillermo Sancho en su primera experiencia en campaña quedó a apenas un puñado de votos de alcanzar la cima. Aunque restan algunas definiciones de la junta partidaria, será el segundo en la lista de Juntos y entrará, cómodo, al Concejo Deliberante, ahora como oposición a la gestión de gobierno a la que perteneció. 

Ante la consulta de Visión Regional el mismo domingo de si la sorprendía el buen resultado electoral obtenido por el espacio, Basso manifestó que no: se condice con lo que ha votado San Pedro en las últimas elecciones, siempre en contra del proyecto "kirchnerista". "De hecho el intendente ganó dos veces con nuestra fuerza", manifestó la abogada radical.

Es cierto. También lo es que fueron los propios referentes de la UCR y el barbierismo los encargados de negociar con Salazar para que él fuera el candidato, con la certeza de los votos propios que traccionaba el Partido Fe, vitales para la resurrección local del partido centenario.

Sin embargo, también es cierto, solo los votos de Salazar no alcanzan. Y esto lo deberá entender, o no, el Frente de Todos si tiene intenciones de revertir los resultados de las PASO: es que, si bien el revés electoral para el oficialismo nacional y provincial fue general y consecuencia de las políticas económicas prometidas y no implementadas, a nivel local, el Frente de Todos perdió por el propio Frente de Todos, o por el "kirchnerismo", dividido aún en el cuestionamiento a las decisiones de Máximo Kirchner y Cristina Fernández, quienes le abrieron la puerta a Salazar al espacio y no dieron lugar a las internas. 

El voto en blanco como tercera fuerza política remarca esta fractura que permite el avance de otras fuerzas. Y mientras en las redes sociales muchos y muchas se horrorizan con "el avance de la derecha", a través de los grupos de Whatsapp, los "puristas del peronismo" que reclamaban internas reconocen que "se les caen las sonrisas" al ver la derrota en las urnas, mientras hablan de estrategias para noviembre y pensar en sus posibilidades para el 2023. "Nunca muy tristes, nunca demasiados contentos", dice el exintendente y referente de un espacio que, inexplicablemente, sigue dentro del Frente de Todos, el mismo espacio al que le da alegría ver perder.

Es cierto que en el entorno del exintendente y la excandidata a intendenta ya hay quienes empezaron a despegarse y apuntarán a trabajar "encolumnados", tal vez no "juntos" pero sí alineados. Es que ciertos mensajes dejan al descubierto las costuras de los lobos disfrazados de corderos. Sin embargo también será Salazar, "el dueño de la lapicera", el que deba abrir la convocatoria a esos espacios, para intentar vencer las diferencias.

Mientras los dos espacios "mayoritarios" dirimen sus cuestiones internas, que no se viven igual en la victoria que en la derrota, claro, los libertarios de Espert en San Pedro, encabezados por Martín Rivas, celebran su rápido ascenso: de la nada a la cuarta fuerza política, con un discurso basado en la política de la antipolítica, la reducción del Estado y la libertad. Habrá que ver el rumbo de la alianza de Milei con los "halcones" del PRO, Patricia Bullrich y Mauricio Macri, que podría devenir en un acuerdo electoral con el sector que localmente representan los hermanos Lafalce quienes no lograron superar el piso interno determinado por Juntos para estas PASO.

La propuesta del socialismo y el randazzismo que encabeza Verónica González sigue en competencia, muy lejos de las proyecciones iniciadas de convertirse en la alternativa más votada.

Con una buena elección a nivel provincial y principalmente seccional, el Frente de Izquierda unidad también sigue en camino y supo llegar a algunos y algunas votantes desilusionados con el Frente de Todos, además de capitalizar el votante fiel a las ideas del espacio que, hay que decirlo, a diferencia de otras alternativas, no cambia según "la dirección del poder".

Miguel Iglesias traccionó votantes evangélicos y antiderechos en su primera experiencia con +Valores. Es cierto que quedó relegado a un sexto lugar con un muy bajo porcentaje de votantes pero también que este movimiento es seguido de cerca en toda Latinoamérica. Rodolfo Sosa cerrará las opciones electorales de noviembre, a las que llegó arañando el 1,5%.

El escenario político sampedrino se sabía, a priori, era una incógnita. El pase de Salazar al Frente de Todos pateó el tablero y no había antecedentes que permitieran saber cómo iba a votar San Pedro. Ahora, con esta gran encuesta electoral realizada, cada sector busca nuevas alternativas para seducir a un electorado apático. 

Muchos esperarán las resoluciones de "arriba", donde se aguarda el "volantazo" en las políticas económicas del gobierno de Alberto Fernández. Otros insistirán con algún slogan marketinero que envuelva conceptos amplios y polisémicos. Los menos, con suerte, hablarán de ideas y propuestas concretas.