En la madrugada de este 30 de diciembre se cumplirá un año desde la histórica sanción de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, traccionada por los feminismos durante más de 15 años. Desde entonces, el derecho de los personas gestantes a decidir sobre su cuerpo es ley. Los equipos interdisciplinarios creados en el sistema de salud permiten recibir a quienes cursan un embarazo, asistirlos y darles las alternativas. Así como muchas personas concretan la interrupción del embarazo, otras, al conocer las alternativas de asistencia de, por ejemplo, el plan 1000 días, continúan con la gestación. Por ello, el derecho al aborto es también un derecho para quienes no quieren interrumpir su embarazo.